En una España cuya renta media para un adulto ha pasado de 19.000 euros en los ochenta a 32.000, los sueldos de los jóvenes han bajado un 50% en ese mismo periodo. Y el 40% está sin trabajo. Hoy ya no son los pensionistas el sector más vulnerable, el 32% de la población de entre 20 y 29 años está en riesgo de pobreza o exclusión social.