Después de haber logrado la dimisión del director de "La Voz de Galicia", Bieito Rubido, el propietario de este diario, Santiago Rey, ha prescindido de la colaboración de Ignacio Ramonet y Ramón Chao. Ambos firmaban en la sección ‘Opinion” sendos artículos semanales desde hacía varios años. Nada se les comunicó a estos dos colaboradores; sencillamente se les dejó de publicar.
Ninguna explicación se ha dado tampoco a los lectores para justificar esta reacción autoritaria que atenta a la pluralidad de opinion. Ramonet y Chao consideran semejante actitud como un acto de censura caciquil intolerable, ajena al espíritu pluralista de "La Voz" mientras la dirigió Bieito Rubido.
Nacido en la localidad gallega de Redondela, Ignacio Ramonet es director, en París, del mensual Le Monde diplomatique. Especialista en geopolítica y estrategia internacional y profesor de teoría de la comunicación en la Universidad Denis Diderot de París, Ramonet es doctor en semiología y en historia de la cultura por la Escuela de Altos Estudios en Ciencias Sociales, donde fue alumno de Roland Barthes. Fundador de ATTAC y uno de los promotores del Foro Social Mundial. Entre sus obras destacan La golosina visual, Un mundo sin rumbo, La tiranía de la comunicación, Rebeldes, dioses y excluidos y Guerras del siglo XXI. Hoy presenta en Madrid su último libro “Fidel Castro, biografía a dos voces”.
Ramón Chao también es gallego, de la localidad lucense de Villalba, es escritor, periodista y músico. Padre del conocido cantante Manu Chao. En París dirigió emisiones radiofónicas en gallego, que fueron prohibidas por Franco, y fue corresponsal de la revista Triunfo. También ha trabajado en la prensa y televisión francesas, como redactor del Servicio de América Latina de Radio France International y colaborador de Le Monde Diplomatique. Ha escrito varios libros entre novelas y biografías, uno de ellos escrito en gallego, O Camiño de Prisciliano, con la cubierta diseñada por Miquel Barceló Es miembro del colectivo antiglobalización Attac.
Ambos se han caracterizado por una clara línea progresista en sus trabajos. Sus columnas de opinión en La Voz de Galicia eran para los lectores una ventana a la realidad y la verdad de los acontecimientos en América Latina, la cultura independiente y los movimientos sociales.
Su censura en este diario gallego supone una nueva vuelta de tuerca en la eliminación de los medios comerciales de toda voz díscola y reivindicativa.
Nota:
Si alguien quiere hacer llegar una carta de protesta, solidaridad con los censurados o en favor de la libertad de prensa y contra la censura, la pede enviar al presidente y amo de La Voz de Galicia, Santiago Rey al correo:
chicha.carreiro@lavoz.es