El pasado 18 de agosto, el diario El Mundo titulaba como noticia principal de internacional que "La Fiscalía de la Audiencia ordena investigar el nexo de ETA y las FARC". Para empezar, el inicio de esa investigación no es ninguna noticia nueva. "Las fiscalías de Colombia y España investigarán los nexos FARC-ETA", tituló AFP el 26 de julio y la BBC tituló el 2 de junio "España investigará nexos FARC-ETA". Pero el diario español intenta convencer a los lectores de que esta investigación es fruto de sus informaciones:
Las revelaciones el pasado mes de junio a EL MUNDO del ex guerrillero arrepentido de las FARC Camilo, que relató cómo presuntos miembros de ETA les enseñaron a activar bombas con móviles, unidas a los datos hallados en el ordenador del fallecido dirigente de la organización terrorista colombiana Raúl Reyes, ha provocado que la Fiscalía de la Audiencia Nacional haya abierto diligencias de investigación para indagar las conexiones entre las dos bandas armadas.
Parece que como no hay ninguna confirmación de esa relación, la técnica es titular todas las semanas con el anuncio de que se investigarán los nexos para consolidar la imagen entre los lectores de que existen. Las sinergias entre medios son curiosas, a pesar de que el titular lleva dos meses y medio regurgitándose en los diarios, tras publicarse en El Mundo lo recogen el mismo día en la agencia mexicana Notimex usando como única fuente lo publicado por el diario español: Ordena Fiscalía de España investigar nexo entre FARC y ETA
Si analizamos detenidamente el texto de la noticia podemos comprobar cómo la existencia de una investigación, que además se inició hace ya dos meses y medio, sirve como justificación para dar por verdadero lo que el fiscal está todavía investigando. Veamos todos los momentos de la noticia en que el diario lo insinúa o lo afirma, a pesar de que no es un hecho probado ni confirmado por autoridad española alguna (entre comillas las citas del artículo de El Mundo, lo no entrecomillado es nuestro):
1.- "El Instituto Armado (se refieren a la Guardia Civil) está convencido de que, al menos entre 2003 y 2004, ETA y FARC colaboraron (…)". No existe ninguna declaración de la Guardia Civil a este respecto.
2.- "La Fiscalía pretende esclarecer la multitud de indicios que apuntan como solventes estas posibles conexiones. Y lo primero, corroborar el testimonio de Camilo." Lo de que existen "multitud de indicios" únicamente lo dice El Mundo. La expresión "corroborar" referente al testimonio del supuesto guerrillero Camilo es tendenciosa, porque sugiere confirmar su versión, que la investigación podría también desmentir.
3.- "El testimonio de Camilo, un alias que encubre la verdadera identidad del joven que perteneció a las FARC hasta hace un año, puede ser una de las claves que demuestren que la banda terrorista española tuvo conexiones con la de la nación sudamericana". Al igual que en el caso anterior, ese testimonio puede ser una de las claves que lo demuestren, o no, pues para eso está la investigación; en cambio el diario sigue empeñado en que la investigación tiene como objeto no aclarar el nexo, sino confirmar la tesis de El Mundo de que existe.
4.- "Para los agentes, la prioridad es identificar a los miembros de ETA de los que habla este arrepentido en su entrevista". Si no están identificados es que tampoco está confirmado que existan esos miembros de ETA, la investigación busca determinar si es verdad o no lo que dice ese testigo de la Fiscalía colombiana.
5.- "Este periódico también informó que, en el 2002, dos representantes de Batasuna, que respondían a los nombres de Sabrina Laverde y Teo de las Casas, mantuvieron encuentros con guerrilleros de los Frentes 50 y 21 de las FARC en el departamento del Tolima. Los investigadores supieron que hablaron de diversas cuestiones como el entrenamiento en explosivos controlados o el impulso a la acción política en Europa. Ambos llegaron a Colombia bajo la cobertura de pertenecer a OSPAAAL (Organización de Solidaridad de los Pueblos de Africa, Asia y América latina) y a la ONG Sol de Asturias." No se sabe a qué investigadores se refiere El Mundo, probablemente sean sólo los escribas del periódico, porque en España no existe confirmación policial alguna sobre eso.
6.- "El fiscal jefe de la Audiencia, Javier Zaragoza, viajó a Bogotá hace dos semanas, y mantuvo diferentes encuentros, como el sostenido con el Fiscal General colombiano, Mario Iguarán. La intención de los colombianos es desmontar la red que ha dado cobertura en Europa a las FARC durante muchos años, ante la pasividad de algunos gobiernos del viejo continente, así como cortar los nexos entre la guerrilla y los grupos criminales extranjeros como ETA." Aquí ya terminan dando por existentes los nexos que todavía no ha establecido la Fiscalía española.
Por si la teoría de El Mundo no está bastante presentada como hecho confirmado, el editorial bajo el título CERCO JUDICIAL A LAS CONEXIONES INTERNACIONALES DE ETA, vuelve a insistir:
aunque el ministro de Interior aseguró entonces que no le constaba que existiera ningún tipo de conexión entre ambos grupos terroristas. La Fiscalía de la Audiencia considera lo contrario, basándose en indicios tan sólidos como los datos obtenidos del ordenador de Raúl Reyes, el fallecido número uno de las FARC, y el testimonio publicado por este diario de Camilo, un guerrillero arrepentido, que narró con detalle como fue adiestrado en la selva venezolana, cerca de Guadalito, en julio de 2007, por dos etarras, uno de ellos se hacía llamar Martín Capa.
Si la Fiscalía investiga los nexos no es que considera que existen, si los diese por seguros no los estaría investigando, habría ya acusaciones e imputaciones. Raúl Reyes no era el número uno de las FARC, sino el número dos. El diario, además, de nuevo da por válido el testimonio de un tal Camilo, sin ninguna otra prueba de veracidad.
Los datos sobre los vínculos entre la guerrilla colombiana y ETA están saliendo a la luz gracias a la eficaz colaboración de la Policía de aquel país con las Fuerzas de Seguridad españolas, como evidenció hace un mes la detención de María Remedios García Albert, presunta representante de las FARC en nuestro país.
No está saliendo a luz ningún vínculo, llevan dos meses y medio investigando sin que la Fiscalía haya hecho pública ninguna confirmación. La detención de Remedios García no prueba nada, el propio diario se cura en salud denominándola “presunta representante”: si es presunta no es evidente su colaboración con las FARC.
El editorial termina
debería ir acompañada de iniciativas del Gobierno para exigir a Hugo Chávez, por ejemplo, que no tolere la presencia de etarras en territorio venezolano.
No se entiende qué pinta Hugo Chávez en todo esto. El gobierno venezolano no ha negado ningún pedido de extradición de ningún etarra emitido por la justicia española. Por otro lado, si es verdad lo que dice El Mundo, que etarras se desplazaron a Colombia a entrenar a la guerrilla de las FARC, a quien habrá que pedirle que no tolere la presencia de etarras en su territorio será a Uribe.