Los secuestros de personas inocentes en Europa por parte de agentes de la CIA ya han provocado las primeras detenciones. Voy a explicar cuáles han sido. Por ejemplo en Carolina del Norte (Estados Unidos), ocho personas han sido arrestadas el 10 de abril por protestar contra la empresa Aero Contractors, la cual estuvo estrechamente vinculada al programa de secuestros de la CIA, y participó en el del ciudadano alemán Khaled El-Masri, quien después sería torturado. Los jueces alemanes habían emitido órdenes de arresto contra tres ejecutivos de Aero Contractors, pero la policía estadounidense ha considerado más oportuno detener a los estadounidenses que exigían que se cumpliera la petición de los jueces alemanes.
En Europa también hay detenciones. Ha sido en Suiza, allí las autoridades han llevado ante la justicia militar a tres periodistas que desvelaron información sobre las cárceles secretas de la CIA en Europa. Los periodistas Sandro Brotz, Beat Jost y Cristoph Grenacher, del periódico Sonntags-Blick, serán juzgados el 17 de abril ante un tribunal militar por publicar un documento de los servicios secretos suizos que puso en evidencia la existencia de prisiones secretas de la CIA en Europa y el traslado de prisioneros.
Pues así está la justicia en el mundo occidental, ardiente defensor de los derechos humanos. Se secuestra clandestinamente a gente inocente, se les lleva a cárceles clandestinas y cuando se descubre todo eso, se detiene y encarcela, ahora ya legalmente, a quienes publican lo que pasó y exigen que se juzgue a los jefes de las empresas que colaboraron en los secuestros.