No son muchos los estadistas fallecidos durante el ejercicio del poder. Franklin D. Roosevelt murió de hemorragia cerebral (1945); el corazón deparó a Francisco Franco una agonía lenta y dolorosa (1975) y a Gamal Abdel Nasser la muerte fulminante (1970); el cáncer acabó con Juan D. Perón (1974) y Hugo Chávez (2013), y Yasser Arafat murió el 11 de noviembre de 2004, por causas que nunca fueron bien aclaradas.
Veinte días antes, Arafat libraba la enésima batalla contra los ejércitos de la entidad neocolonial llamada Israel
, que desde septiembre de 2002 tenían sitiado el cuartel general de La Mukata (sede de la Autoridad Nacional Palestina, ANP), ubicado en Ramallah (Cisjordania).